PATRICIA URQUIOLA, ¿la mejor diseñadora del mundo?
Patricia Urquiola nació en Asturias (Oviedo 1961) pero es de ascendencia vasca. Desde hace tiempo reside y trabaja en la ciudad de Milán, se califica como hispano-milanesa, hija de padre vasco.
A los 18 años, animada por sus padres, abandona su zona de confort y deja Asturias para ir a estudiar Arquitectura a Madrid (ETSAM). Esto es algo que las personas creativas suelen hacer, ponerse las cosas un poco más difíciles para ver las cosas desde otras perspectivas.
Pero no se queda allí, marcha a Italia a estudiar al Politécnico de Milán. Es una de las primeras estudiantes extranjeras en su facultad, todavía no existía el programa Erasmus, en su paso por el Politécnico tuvo la oportunidad de encontrarse con sus mentores, los grandes maestros del Movimiento Moderno.
Ellos guiaron a Urquiola, iniciándola en las claves del diseño moderno de calidad, Achille Castiglioni, Vico Magistretti, Gio Ponti , Ettore Sottssas, Marco Zanuso. Alumna aventajada y casi única el ser mujer en un mundo hombres, teóricos de las artes, arquitectos y diseñadores industriales.
Le dirigió su tesis doctoral el mismísimo Achille Castiglioni, graduándose en 1989. De 1990 a 1996 trabajó en la oficina de desarrollo de nuevos productos de De Padova. La contrata Maddalena de Padova, trabajando bajo la supervisión de Vico Magistretti, con el que Urquiola empieza a firmar sus primeros productos.
En 1996 se convirtió en directora de diseño de Lissoni Associati. En 2001 definitivamente abre su propio estudio. Realiza diseño de producto para gran diversidad de fabricantes, dando la impresión de no tener límites su creatividad, sofás, sillas, mesas, lámparas, alfombras.., donde se ponen de manifiesto el talento y la fuerza creativa de la diseñadora, así como su visión contemporánea y renovada del mueble, proyectos de arquitectura, showrooms e instalaciones o creación de concepto.
En el año 2001 ya presenta en la Feria del Mueble de Milán, el sofá Lowland para Moroso. Se puede aprecia la versatilidad de su trabajo, la experimentación con nuevas técnicas y materiales, la fusión entre artesanía e industria, que junto con el alto contenido cultural del que dota a sus obras, así como su preocupación por la conservación del planeta, la han colocado sin lugar a dudas en los primeros puestos del ranking mundial de los diseñadores más prestigiosos e influyentes del siglo XXI. Diseños muy cercanos al arte en sí.
El uso que Patricia Urquiola hace de la memoria, el estudio de los modelos clásicos y modernos, así como la posesión de un gran número de datos culturales le permiten con gran facilidad proyectar versiones contemporáneas de modelos anteriores, convirtiéndola en una renovadora de la tradición, sobre todo en asientos en el que se ha convertido en especialista.
De Padova, Moroso, B&B Italia, Kartell, Andreu World, son algunas de las marcas que han fabricado sus reinterpretaciones de sillas y butacas. Pero también cabe destacar su desarrollo
de distintos productos para firmas como Nanimarquina, Gandía Blasco – Gan, Viccarbe, Kettal, Flos, MDF Italia, Alessi, Molteni…, proyectos de arquitectura como unas torres residenciales en Shangai, el Hotel Mandarín Oriental en Barcelona, Das Stue Hotel en Berlín, showrooms e instalaciones para BMW, Panerai, Cassina, Missoni, también están presentes sus diseños en el MoMA de Nueva York, en Les Arts Decoratifs de París, en el Vitra Design de Basilea, en la Triennale de Milán o en el Victorian and Albert de Londres.
Patricia Urquiola es diseñadora del año y diseñadora de la década para diversas revistas especializadas, así como Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, otorgada por el Gobierno de España y la Orden de Isabel la Católica, otorgada por Su Majestad Juan Carlos I.
A través del prisma de la obra de Patricia Urquiola, se deja atisbar el importantísimo papel que va a jugar la mujer en el diseño del siglo XXI.
Patricia Urquiola: “El diseño nos ayuda a crear herramientas que nos puedan facilitar la vida”